“La idea principal no es generar materiales de producción de gran escala, sino enfocarnos en una producción más limitada donde podamos hacer un aporte intensivo de tecnologías” señala el director del proyecto e investigador independiente del CONICET, Jorge Malarría, quien destaca que estos desarrollos serán de especial interés para pequeñas y medianas empresas (Pymes).
El proyecto de investigación, “Producción, procesamiento y evaluación de aleaciones avanzadas de impacto tecnológico en la industria metal-mecánica regional y la industria nuclear nacional” que fue seleccionado en la “Convocatoria 2016 de Proyectos de Investigación de Unidades Ejecutoras del CONICET”, tiene como objetivo el desarrollo de materiales y de los procesos que estos implican, que presenten beneficios para la industria metalmecánica, apuntando a una mejora de la competitividad industrial basada sobre todo en la innovación y la calidad de los materiales.
“Queremos aportar una mejora competitiva en aceros para aplicaciones específicas que demandan alta resistencia a roturas, a la deformación, o al desgaste, bajo condiciones severas de uso” cuenta Malarría.
Desde la plataforma
En el marco de este proyecto, el grupo de investigación va a desarrollar una plataforma de elaboración de materiales, cuyo núcleo central es un horno de inducción que permite operar bajo vacío, para obtener aleaciones bien controladas, no contaminadas, con composiciones bien definidas y sobre este aspecto Malarría indica “desarrollar este equipamiento es básico para alimentar las necesidades del proyecto, porque después se va a recurrir a esa plataforma de elaboración para las distintas líneas de investigación que pretendemos abarcar”.
Una de las líneas en las que los científicos van a experimentar e innovar se trata de aceros fuertemente deformables para la industria automotriz. “Algunos ya están presentes en esta industria por ejemplo, aceros de nueva generación cuya deformación está basada en fenómenos de lo que se conoce como maclado o transformación de fases, que deforman incorporando mecanismos que no son solamente el clásico deslizamiento plástico y que presentan otras propiedades interesantes” cuenta el investigador.
“Otra parte del proyecto apunta a desarrollar aceros de alta resistencia y ductilidad, más livianos, aceros doble fase” explica Malarría y agrega “Además, y esto es muy relevante en las actividades programadas, el proyecto contempla modificar ciertas propiedades en la superficie de los aceros, mediante recubrimientos cerámicos, nitruración por plasma, o bien por impacto mediante láser, con una técnica llamada laser shock peening, que permite modificar la superficie para dotar al material de una mayor resistencia a la fatiga, a la corrosión, mejorando propiedades tribológicas tales como su resistencia al desgaste”.
Como parte del proyecto, el grupo de científicos, motivados por los requerimientos del sector Nuclear Argentino, se propone incrementar y retomar la participación de investigadores del IFIR en tareas relacionadas con la caracterización de aleaciones de uso nuclear en el marco del programa de extensión de vida de las centrales nucleares. “Se trata de una demanda muy específica, que requiere caracterizar la deformación de aleaciones de circonio (Zircaloy-2, Zircaloy-4, y aleaciones de Zr-Nb) mediante técnica de difractometría y microdifractometría, así como el desarrollo de herramientas numéricas de procesos de deformación para la asistir en la toma de decisión de diseño y regulación necesarias” cuenta Malarría.
Aleaciones
“Apuntamos a Pymes que tienen o se proponen hacer desarrollos para la demanda de aleaciones especiales. Tratamos de cubrir un área de vacancia en la zona de Rosario, y en Argentina, que es el desarrollo de material original” cuenta Malarría y explica que las aleaciones son producto de fundir de distintos componentes metálicos, en este caso con una fuerte presencia de hierro al que se le agregan aditivos tales como manganeso, cromo, silicio, niquel, aluminio.
Con respecto al interés por cubrir el espacio poco explorado de la producción de aleaciones especiales, el investigador señala que generalmente la industria opera con aleaciones que se obtienen de acuerdo a normas, o bien directamente se compra el insumo si se trata de algo no convencional. “Aunque resulte sorprendente, cuando se necesitan aleaciones especiales no hay actualmente en la industria ni en los laboratorios capacidad para desarrollar una aleación novedosa. Es una capacidad que tuvo cierto desarrollo hace muchos años en el área de Rosario, en la Facultad de Ingeniería y en el Instituto Politécnico en UNR, pero que se perdió en la década del ´70. Nosotros ahora estamos tratando de retomar la producción de productos originales incorporando y desarrollando equipamiento, y recursos humanos dedicados a la actividad” sostiene Malarría.
Por Ana Paradiso
CONICET Rosario
Integrantes del Proyecto del IFIR
Jorge Alberto Malarria (Director), Raúl Eduardo Bolmaro, Nora Susana Pellegri, Iris Álvarez, Javier Walter Signorelli, Martina Cecilia Ávalos, Silvina Hereñu, Ana Velia Druker, Bernardo José Gómez, Analía Roatta, Guillermo Kaufmann, Agustín Frattini, Mauro Martín, Nadia Mamana, Sebastián Barolin, Gustavo Ernesto Galizzi, María Virginia Roldan, Lucio Manuel Isola, Leonardo Rico, Cesar Sobrero, María de los Angeles Bertinetti, Valeria de los Ángeles Fuster, María Cecilia Marinelli, Renata Strubbia, María Florencia Giordana, María Luz Santiago, Marcela Ángela Balbi, María Natalia Batista, María Gabriela Moscato, Natalia Soledad De Vincentis, Emanuel Benatti, Leticia Spadaro, Marcio Raposo, Lucía Imhoff, Juan Manuel Vallejos, Isidro Gabriel Esquivel, Martin Eduardo Leonard, Estanislao Porta.
Responsable institucional: Roberto Rivarola
