El grupo de investigadores rosarinos liderado por Diego de Mendoza usó un modelo animal multicelular, muy pequeño, en el que probaron con éxito los primeros pasos de un desarrollo científico que abre una puerta para mejorar la calidad de vida de chicos con una enfermedad severa y poco frecuente. Aún no fue aplicado a seres humanos, pero el avance es único en el mundo.
Los días 15, 16, 17, 22 y 23 de septiembre, visitaron institutos de investigación del CONICET Rosario, grupos de alumnos de escuelas secundarias y de la comunidad de Rosario, en el marco de la XIV Semana Nacional de la Ciencia, la Tecnología y el Arte Científico.