Era becaria doctoral en el IBR, y el miércoles 18 de septiembre, a las 16.30 h, compañeros y compañeras decidieron conmemorar su existencia plantando un árbol frente al predio del Instituto, y la recordaron con estas palabras:
"Su partida ha sido un golpe inesperado para todos/as nosotros/as, y deseamos honrar su memoria con un acto que refleje el gran impacto que tuvo en nuestras vidas, tanto a nivel personal como profesional.
Gina nació en la ciudad de Venado Tuerto, donde comenzó a forjar su camino con una vocación indiscutible por construir un mundo más justo. Realizó su carrera universitaria en la Facultad de Ciencias Bioquímicas y Farmacéuticas, destacándose no solo por su excelencia académica, sino también por su compromiso con la docencia. Actualmente, se encontraba cursando su doctorado en Instituto de Biología Molecular y Celular de Rosario, donde continuaba aportando con su entusiasmo y dedicación.
Su paso por nuestra comunidad no solo dejó una huella profesional invaluable, sino que su calidad humana y su empatía hacia sus colegas marcaron profundamente a todos/as quienes tuvimos el privilegio de compartir con ella. Su capacidad para brindar apoyo, su calidez y generosidad fueron tan importantes como sus contribuciones científicas y académicas".