El 5 de febrero de 1958 se creó el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), ente autárquico dedicado a promover la investigación científica y tecnológica del país. Bernardo Houssay, Premio Nobel de Medicina, fue su primer presidente. Desde entonces, el CONICET sigue siendo la institución emblema de la ciencia y destina todos los esfuerzos en mejorar la vida cotidiana de los argentinos.